A la hora de afrontar la creación de un nuevo curso cada maestrillo tiene su librillo y por ello hemos pensado que es interesante que cada uno exponga su manera de hacerlo, para que tú reflexiones sobre cuál es la tuya actual o cómo lo enfocarás en un futuro próximo.
Pero antes veamos cómo ha ido nuestra semana:
Francesc:
A parte de su trabajo diario (que no es poco), ha aprovechado para seguir formándose en cositas nuevas y para pensar y tomar decisiones.
David:
Después de batallar con el servicio técnico de Apple e intercambiar no pocos de correos durante casi 3 semanas. Finalmente… (redoble) …¡ya estamos en iTunes! Y no gracias a la ayuda de Apple, sino a un tweet que vio por casualidad, que exponía la solución.
Ahora sí, vamos con el tema de la semana.
Cómo planifica sus cursos Francesc:
1- Planificar línea de cursos
Antes de planificar un curso, primero planea una línea de cursos a seguir. Esto le resulta útil de cara a definir un orden lógico para ir aumentando el nivel de dificultad.
También le permite que haya variedad de los cursos que ofrecerá y no centrarse sólo en una única temática.
2- Tener claro el nivel de los alumnos
No sólo el que tienen sino el que buscan alcanzar. Para averiguar esto envía encuestas a los alumnos más veteranos (VIP) para pedirles feedback y obtener el dato de primera mano.
3- Decide el orden de publicación
De nuevo lo hace mediante encuestas a los alumnos. Aquí cabe destacar que no sólo tiene en cuenta los cursos más votados, sino que también intenta darle salida a cursos que una porción de alumnos están interesados. De esa forma consigue la variedad antes mencionada.
Aclarar que todos los alumnos pueden proponer cursos, tengan la antigüedad que tengan.
4- Define cuáles van a ser las lecciones
Una vez sabe la temática del curso, agrupa los distintos conceptos importantes en lecciones.
No se ajusta a un número de lecciones concreto. Hay cursos que tienen más y otros menos.
Además, intenta no dar por sabido conceptos y siempre se pone en la piel del alumno.
5- Practica cada lección
Practica todos los puntos que se ha apuntado, para ver si se ha dejado algo importante. De esa forma cuando se disponga a grabar todo fluye mucho más.
Cómo lo hace David:
1- Elección de la temática
Primero elige el tema del qué va a tratar el curso, analizando entre las propuestas más demandadas de los alumnos.
📚 En caso de que estés empezando (cuando aún no dispones de feedback de alumnos) puedes elegir temática en base a tus conocimientos y experiencia. Piensa en qué es lo más útil que puedes enseñar.
Además, a la hora de afrontar un nuevo curso siempre intenta tener experiencia real de lo que va a enseñar (haberlo probado antes). Por eso considera que a parte de ser instructor es importante seguir trabajando con clientes, ya que así puedes ver si algo realmente funciona y qué problemas te puedes encontrar por el camino.
Pero como no siempre le resulta posible haber aplicado todo lo que enseña con clientes reales, en ese caso intenta aplicar ese conocimiento en sus propios proyectos.
2- ¿Hay algún prerrequisito?
En caso de que lo quieran aprender los alumnos requiera algún conocimiento previo que aún no disponen, será necesario crear primero un curso sobre ello.
Esto le ha pasado muchas veces, los alumnos le han pedido cursos sobre temas complejos y para poder explicarles eso, antes ha tenido que crear varios cursos de menor dificultad para que luego puedan seguir el curso sin problemas.
3- Fase de «reformación»
Cuando ya ha elegido el tema, empieza lo que él llama la fase de “reformación”, es decir, volver a formarse en algo que ya conoce, mediante distintas fuentes como pueden ser: documentaciones oficiales, libros, cursos online (normalmente en inglés), para ver cómo lo explican/enfocan e intentar quedarse con lo bueno de cada uno y desechar el resto, o como decía Picasso:
Los buenos artistas copian, los grandes roban.
Pablo Picasso
4- Definición de la estructura
Durante esta fase anota las cosas que le parecen más interesantes para empezar a definir la estructura inicial del curso y con qué módulos y lecciones contará. Para este proceso se ayuda de una hoja de cálculo donde:
- Al lado de cada lección, añade enlaces a recursos externos que explican a fondo ese tema, por si el alumno quiere seguir investigando.
- Intenta pensar en la forma más sencilla de explicar ese tema, buscando ejemplos cotidianos (a poder ser con un toque de humor para que cualquiera pueda entenderlo). Lo que viene siendo aterrizar conceptos.
- Además como enseña código debe pensar en mini proyectos o proyectos complejos que se van a llevar a cabo en ese curso.
5- Qué curso vendrá luego
David es muy indeciso respecto cuál será el siguiente curso que vendrá, y prefiere decidirlo mientras está creando el actual, según las necesidades que se va encontrando. Es decir, pensar en cuáles serán los próximos 5 cursos que va a hacer le estresa mogollón.
Además, si el curso que va a llevar a cab va a ser muy largo, por ejemplo, tiene uno que dura 25h, le resulta imposible planificar toda su estructura por adelantado (todas las lecciones que tendrá) y prefiere enfocarlo módulo por módulo.
6- Cuántas lecciones tendrá el curso
Prefiere que los cursos duren lo que tengan que durar, no se siente cómodo forzando a que un curso tenga siempre X lecciones. Este hecho aullenta a unos, pero gusta a otros.
Conclusión:
Como ya dijimos al inicio, cada instructor tiene su propia forma de planear los cursos y ninguna es más correcta que otra. ¡Lo importante es ponerse manos a la obra!
¡Sed muy felices!
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